Historia del Siglo XX – Eric Hobsbawm

Qué nos sirva para realizar lecturas históricas.

Ayer, viernes 25 de noviembre del 2016, Fidel Castró fallecía en la Habana, capital de Cuba.

Justamente, siempre ví a esa particular perla del caribe como una separación simbólica entre la américa del norte del resto; nuestra américa: Latinoamerica.

Cuba durante gran parte del siglo XIX y del XX fue un país que parecía condenado a tener las estructuras de «país caribeño» y a seguir su trágico destino. Quizá incluso agravado por uno mucho peor, el más trágico: ser el mejor y más florido jardín de Estados Unidos. Sin embargo la historia de los hombres y mujeres de esa isla nos propusieron otra cosa. Y por eso hoy estudiamos minuciosamente ese país como un gran ejemplo, entre muchas cosas, de rebeldía. Por que ser uno de los principales atacantes de Estados Unidos teniéndolos al lado, parece meritorio de por sí.

Para entender un poco el estado de situación la Cuba pre-revolucionara pueden leer: La economía cubana desde el siglo XVI al XX: del colonialismo al socialismo con mercado o la más que clásica obra: El ingenio: complejo económico social cubano del azúcar.

Lo que quiero decir, especialmente a muchos habitantes del cono sur, es: comprender lo que sucede en Cuba, requiere lecturas y entender algunos clivajes complejos de su propia historia. Qué nos merecemos entender.

Saber un poco más es bueno y deseable.

Por otro lado, además de esta lecturas, sería deseable romper el mito de lo que Cuba ‘es’. En el mundo se extendió la muy mala costumbre de que Cuba sólo exista después de la revolución o con algunas cosa un tanto estereotipadas.

Parece que el país Caribeño es sólo una revolución dos vanvaneros, un sonero, tres rumberos y nada más. No es así. No es así categóricamente.

Sólo, por dar un ejemplo; el mejor ajedrecista latinoamericano de todos los tiempos se llama José Raú Capablanca: Cubano. Sirvan estos pequeños vídeos para romper un poco el bloqueo cerebral y aprendamos un poco más de un país.

https://www.youtube.com/watch?v=BXocfSqj4i4

Película de Capablanca (Duración: 1 Hora 30 Minutos)

Fidel Castro: El último sujeto histórico del siglo XX ha muerto.

Pero, ¿entienden la relevancia de Fidel Castro para la historia mundial?, los pongo en contexto: mis padres nacieron en 1960. Fidel Castro ya era parte de la historia: Era uno de los líderes de la triunfante revolución Cubana. Cuándo tenían dos años cohabitaron las crisis de los misiles, luego llegó el mayo francés. Fidel estaba ahí, como actor político en la primera, como uno de sus inspiradores de la segunda. Cuando fueron adultos, Fidel ya era un personaje histórico: ¡Había que matarlo!¡Había que protegerlo!. No podíamos ignorarlos.

Mi tío nació en los 70. Para ese entonces Fidel Castro era el líder indiscutido de Cuba, dividía al mundo. Era uno de los principales peligros para que la sociedad «occidental y cristiana» esté tranquila y plácida en el resto de la América Latina. Su «fantasmagórica» presencia afianzaba en los militares latinoamericanos la profunda convicción de que el comunismo se iba a expandir, por lo tanto había que lucha contra todo gobierno con tendencias izquierdistas (Como sucedió con Allende) o detener los procesos de movilización populares; en aquel momento se denominó a esa estrategia “doctrina de seguridad nacional”. Fueron momentos tumultuosos, violentos. Fidel Castro estaba ahí.

Yo nací en los 80, Fidel se convirtió en ese entonces uno de los pocos gobernantes de un país con el socialismo “realmente existente” luego del 89. Con la eclosión de la URSS todos lo vieron acabado. No fue así. Jamás leí nada de esa época más que algunos problemas. Algún día leeré más.

Mi sobrina nación en los 2000. Fidel era uno de los inspiradores de la nueva izquierda latinoamericana que estaba naciendo de la mano de Hugo Chavez en Venezuela. Chavez murió. Fidel siguió aquí.

Mi prima nació en el 2014, cohabitó en el mundo donde Barack Obama (Presidente de los Estados Unidos) aún consideraba relevante la opinión de Fidel Castro.

A partir de ayer podremos liberar a Fidel. Podremos elaborar sus obras completas. De ahora en más, deberemos leerle en los manuales de historial. A partir de ayer Fidel será un monumento, un procer, un villano y un traidor, será algo que nos divida, será un sujeto histórico. Será esas personas polémicas que no serán olvidadas por generaciones. Finalmente el tiempo hará lo suyo y lo enviará junto con Augusto, Cesar, Alarico, Magno y muchos otros. Lo que no podremos hacer es ignorarlo.

 Historia del Siglo XX. Un libro para acercarse a Cuba, a Fidel y a muchas cosas más.

Por eso, en honor a un personaje rutilante, polémico y totalmente imprescindible a la hora de leer y entender que sucedió en el siglo XX vamos a realizar una reseña del libro “Historia del Siglo XX” de Eric Hobsbawm. Leerlo es hacer justicia y además una buena forma de encauzar tanta «opinocracia» que tenemos ganas de llevar adelante.

El libro de por sí es una obra de arte y un gran libro que, de manera general y a vuelo de pájaro toma la historia del siglo XX y trata de analizarla como un todo. Sus cambios económicos, políticos, sociales y culturales. Es así que recorre todos los temas hasta la caída del muro de Berlín (y un poco más).  Vemos las guerras mundiales, las revoluciones y la violencia del siglo más violento hasta nuestros días en la historia de la humanidad.

La división de la obra es tripartita. Primero encontramos “La era de las catástrofes” donde podemos leer los acontecimientos relacionados a las guerras mundiales las disoluciones de los imperios, el nacimiento de la URSS y el Crash del 29. Luego arribamos a “La edad de oro” La reconstrucción de postguerra, el Plan Marshall, el capitalismo en su máxima expresión y su mejor cara: El Estado Benefactor. Pero también la etapa de la revolución social. Justamente la etapa donde Fidel deja de ser Fidel y pasa a ser Castro el líder de la revolución. Cómo tercera y última parte encontramos “El Derrumbamiento” que se inicia explicando las crisis del 73, las guerras de medio oriente, la caída del muro de Berlín y posterior desmembramiento de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas.

Para todos los interesados en la historia del mundo es un material indispensable, e indiscutible. De hecho es un texto de lectura en muchas carreras (Economía, Sociología, Ciencia Política. Incluso Historia), pero esto no le arrebata su placer a la hora de transitarlo. Mi único consejo es: no traten de memorizar todo, porque Hobsbawm usa mucho el dato para explicar sucesos que se condensan y eso puede marear a aquellos enciclopedistas de la historia y de la vida.

El siglo XX fue un siglo “Corto” ya que su recorrido es desde la primera guerra mundial (1914) hasta la caída del muro de Berlín (1989). Todo el recorrido y los principales clivajes del período se encuentran comprendidos en ese tiempo histórico. Con Historias del siglo XX vamos a encontrar un buen acompañante en desentrañar algunas pistas que, aunque ya 16 (o 15) años después nos nutren

Por otro lado, es lo único que nos queda del siglo XX. Fidel Castro ha muerto. Quién fue el imán de una atención mundial, quién pudo sobrevivir y vivir entre potencias. Uno de los hombres del siglo XX ya no está entre nosotros.

Ahora es nuestro deber (especialmente para los no cubanos y los que vivimos un ápice de la época) y nuestra obligación informarnos sobre ese suceso, entender lo que lo motivó, a quienes se enfrentó, qué hizo y qué dejo de hacer este hombre. Qué, hasta ayer, era el último bastión del siglo XX.

Eric Hobsbawn en su historia del siglo XX lo recreará con altura. A buscarlo y encarar su lectura.